Isami se levanta temprano a buscar una rosa silvestre en la puerta de su casa. Hoy es su cumpleaños, y su padre, que lleva varios años desaparecido, siempre le trae una rosa silvestre. Incapaz de encontrarla, Isami se dirige a la escuela deprimida y es testigo del atropello de una anciana en la que el conductor se da a la fuga. Afortunadamente, la anciana sufre heridas leves, pero después de clase, Isami es atacada por una moto.